21/3/15

¿Crees que tu bolso no importa?


Foto: @nasualua via instagram

Hace algún tiempo una clienta me pidió consejo porque quería comprarse un bolso grande para poder poner de todo, quería una pieza que le fuera polivalente para llevar desde sus cosas básicas: monedero, klenex, llaves, neceser, etc... hasta sus documentos, carpetas, libros, la tablet o el portátil.

Esta clienta es una emprendedora consolidada con muchos años de experiencia a sus espaldas y que está involucrada en varios proyectos a la vez. De ahí que necesite un “sitio” donde llevar muchas cosas en diferentes ocasiones y para diferentes necesidades.

Pero a la vez quería una pieza bonita, con estilo, con personalidad y elegante. Un complemento más de su conjunto que le sirviera para todas las ocasiones de trabajo posibles y que no desentonara allí donde fuera.

Algo con qué sentirse segura. Segura de que sus “cosas” estan bien guardadas y segura de que se adapta a su estilo.

¿Como es tu bolso? 
¿Cumple con todas tus necesidades? 
¿Es versátil?

Nada más contarme su necesidad vi claro que lo que necesitaba era un bolso tipo “shopping bag” y hoy voy a compartir contigo las claves que compartí con ella para comprar un bolso grande que cubra todas tus necesidades, porque tener un buen complemento a mano (nunca mejor dicho) te hará quedar bien, irás elegante, ordenada y te sentirás a gusto y segura con él.


¿Cuantas veces no te ha pasado que llevas 
más de un paquete encima, 
con diferentes bolsas que parece 
que te hayas fugado de casa?



Que si el bolso, la bolsa de muestras para el cliente que vas a ver, que si el maletín colgado de lado para llevar el portátil, la totem bag para los documentos que necesitas para esta reunión tan importante, el paraguas por si acaso colgado del brazo y la bolsa de plástico que te han dado en la panadería con el pan y algo para picar...


¿Cómo te sientes cuando vas tan cargada? 


Te pueden venir a la cabeza muchas imágenes y muy probablemente ninguna sea del todo buena... 





¿Te has parado a pensar qué imagen estás dando? 
¿Que pensarías tú si te apareciera un proveedor 
cargado con tantas bolsas y paquetes? 
¿Crees que es elegante y te ayuda con la imagen que quieres dar?


Aquí tienes las claves para comprar una shopping bag adecuada para ti según tus necesidades y que compartí con mi clienta, pero antes te cuento un par de cosas más.

Empezaré por contarte que una “shopping bag” no es más que un bolso grande para poder poner de todo en él. Además están muy de moda, por lo que hay muchos para escoger, de diferentes formas, materiales, a parte de ser elegantes, estilosos e ideales para una chica moderna como tú.

Existen básicamente en dos formas: verticales y horizontales, las dos formas son válidas, va a gusto de cada cual. 
Hay quien le gustará más que sea más estrecho pero más largo y otras más ancho pero más corto, tú decides.

Puedes encontrar este tipo de bolsos de todas las gamas y marcas actuales, desde las low cost, pasando por marcas intermedias y terminando por las firmas de lujo. Esto dependerá de lo que estés dispuesta a invertir en él.

Si es la primera vez que te compras uno y no tienes muy claro si te va a funcionar, si le darás la utilidad adecuada, etc... te recomendaría que no te gastes mucho, que lo pruebes y si realmente es tu pieza clave, luego inviertas en uno más caro y más duradero.


Ahora sí, mis recomendaciones para comprarte una shopping bag:


1. Cómpralo en una tienda física. 
Soy la primera que cada vez compro más por internet, es cómodo, seguro, me ahorro colas y un sinfín de facilidades, pero en este caso no me arriesgaría, a no ser que ya lo hubiera visto físicamente en una tienda.

Que ¿Porque? Pues para poder tocarlo y pesarlo. Si, si, has leído bien. ¿Cuantas veces te has comprado un bolso y éste en si ya pesaba lo suyo? Pues imagínate si encima tienes que ir cargándolo de cosas: documentos, tablets, carpetas, muestras, etc... Al final te puedes encontrar que llevas más una maleta que un bolso.

Piensa que lo tienes que llevar todo el día y que a medida que va pasando la jornada y el cansancio se apodera de ti, llevar un bolso ligero lo vas a agradecer.



2. Que tenga como mínimo tres posibilidades de llevar. 
Con asas cortas para llevarlo como bolso de mano, con una cinta más larga para poder colgártelo del hombro y una tira aun más larga (o la anterior regulable) para poder llevarlo colgado de lado, como una bandolera.

Esto hará que el bolso sea más versátil y polivalente con infinidades de posibilidades adaptables a cualquier situación imprevista.

A lo mejor ahora no tienes intención de llevarlo de estas tres maneras pero te puedes encontrar con situaciones que necesites llevarlo de alguna otra manera y te lo va a facilitar.


Tus necesidades van 
cambiando con el tiempo y 
tienes que ser flexible 
adaptarte a los cambios


Aunque ahora tus necesidades sean unas determinadas quien sabe las necesidades que tendrás mañana, el mes que viene o el año próximo, y tener un bolso que se adapte a tu estilo de vida ahora y más adelante, te sacará de muchos apuros, lo amortizarás y te sentirás orgullosa de tener un complemento que te ayuda además de quedarte bien.

Por ejemplo:
Si quieres ir más elegante lo puedes llevar cogido de las asas
Si necesitas las dos manos libres porque cuando termines tu jornada laboral necesitas ir a hacer la compra te lo puedes colgar del hombro.
Si te desplazas en moto o en bici, poder colgártelo de lado te facilitará el transporte y hará que el trayecto te sea más cómodo.

Esta versatilidad también te ayudará a dar una determinada imagen en función del sitio donde tengas que ir. 


Si lo llevas colgado de lado darás una imagen más moderna 
y si lo llevas de la mano (no colgado de medio brazo) 
darás una imagen más seria.



3. Cómpratelo de un color neutro.
Tener un bolso de color neutro (negro, azul marino, gris o marrón) hará que lo puedas llevar con cualquier conjunto, no tendrás que estar pendiente de si te queda bien con el look que llevas y esto te va a facilitar tu día a día.

Ahora existen muchos modelos de muchos colores diferentes, colores de temporada, fuertes, vivos y bonitos. La verdad es que son geniales y especiales que pueden dar un toque muy diferente a tu estilo y son una muy buena opción.

Pero si es la primera shopping bag que te compras, quieres probarlo y quieres que te vaya bien con toda la ropa que tienes en el armario, es mejor que empieces por uno que sea neutro y el siguiente para tener uno más, que sea de un color más especial.



4. Que sea de un material resistente.
Si tu intención con el bolso es poder ponerle de todo y más, tiene que ser resistente y con unas asas fuertes y bien fijadas. 

¿De que te sirve un bolso que en un momento dado, 
con un poco más de peso del habitual te quedes con las asas en la mano? 


Estas ocasiones pasan y además son donde se presenta el sr. Murphy y muy probablemente será el peor día o situación en que te pueda pasar. 


¿Quieres arriesgarte a que te pase en una reunión muy importante 
o cuando estas visitando a un cliente que necesitas quedar bien?



5. Que sea de líneas simples y estilo minimalista.
Cuanto más minimalista sea el diseño más te ayudará a que te quede bien con lo que lleves.

¡Ojo! Cuando digo simple me refiero con pocos ornamentos. Porque un bolso sea simple no quiere decir que sea más feo o menos elegante, no tiene nada que ver.

Seguramente debes tener ropa de diferentes estilos en tu armario (¿Quieres saber como vestirte según tu estilo? sigue leyendo AQUI y para saber si tu armario habla de ti, haz clic AQUI), si te compras una shopping bag de un estilo muy determinado te va a condicionar a la hora de vestirte y si te lo pones, se va a notar y no va a quedar bien, y precisamente lo que quieres es estar elegante y transmitir personalidad y seguridad


Como dicen, menos es más. 
Aplícalo siempre, no te va a fallar.



¿Tienes una shopping bag? ¿Cómo es?
¿Cómo te gustaría que fuese tu shopping bag?


Te espero en los comentarios, para compartir opiniones.

Gracias por leerme.


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